Desfile de Acne Studios. Parte II. Sreet style.

Continuaré por donde lo deje el otro día. Salí y me encontré a un montón de fotógrafos en
la puerta esperando. Junto a mí salían otros asistentes, invitados del desfile y personas que salían de visitar la exposición L'État du Ciel.

Bajé rápidamente las escaleritas y me uní a ellos. Las opciones que voy explicar a continuación van alternándose hasta que todo el mundo ha salido del desfile:

-Si la persona que sale es conocida por todos pueden ocurrir dos cosas:

1) Sale corriendo sin ganas de ser fotografiada por nadie, dejando a su paso fotos borrosas y con malos ángulos.

2) Se para y va girándose para que todo el mundo pueda tener una foto en la que se le vea de frente y perfil. Después será perseguida hasta meterse en el coche o desaparecer por la avenida Wilson por fotógrafos retraídos o poco satisfechos con sus fotos.

-Un fotógrafo toma la iniciativa y hace una foto, o da un grito pidiendo a la “susudicho/a” que pare. Entonces el resto de fotógrafos – o gente con cámara- sacan también una foto sin saber muy bien a quién o porqué.

-Por último están los que no han entrado al desfile y por lo tanto no han salido, ¿qué hacen? Pasearse por la puerta y esperar a que alguien le pida que si por favor puede hacerle una foto.

El nombre de las distintas modelo o su popularidad no es una cosa que controle,

pero no hizo falta. Algunas salían sin despertar mucho escándalo, con vergüenza e intentando escabullirse lo antes posible, otras saludaban y se dejaban sacar fotos contestado a la pregunta del millón: "¿De quién vas vestida?

No tengo muchas fotos de street style porque:

1) Cuando salía alguien que todo el mundo quería fotografíar, si estaba cerca, dejaba pasar a los fotógrafos (que es su trabajo) y para cuando quería hacer la foto era tarde, por lo que la mitad de este día están borrosas.

2) Ya dije que mi cámara no es de lo mejor y, por lo tanto, entre tanto profesional es bastante ridículo pedirle a alguien en concreto que si puedo hacerle una foto.

Me encontré a una blogger española, Sara, de Collage Vintage. Había escuchado que es muy maja, y aunque fue cuestión de minutos ( si no segundos) fue muy simpática.